'La Pasión' congregó a más de 800 personas

Titular para Farándula Don Bosco en "La voz de Marchena" por la representación en la Casa de la Cultura el pasado 29 de marzo

La voz de Marchena
Lunes, 31 de marzo de 2014

Lleno absoluto en la sala de Cultura para presenciar la obra teatral del grupo Don Bosco, que llevó al público por la vida y obra de Cristo, concretamente por la 'Pasión', como así se conoce a la Semana Santa desde su entrada en Jerusalén hasta su muerte y resurrección. Un amplio número de actores y una escenografía cuidada, cautivaron al respetable, que vibró con la obra disfrutando y sufriendo con la recreación de los duros momentos del proceso al que fue sometido Jesucristo.

El público no faltó a esta cita organizada por la hermandad de la Borriquita y que había generado gran expectación. Se desarrolló durante 120 intensos minutos en la sala de Cultura, pasando por el escenario gran cantidad de actores.

Destacaron los ropajes típicos de la época, los numerosos personajes históricos que fueron representados y algunas escenas de impactante dureza, además de la voz en off narradora de los hechos y la música tradicional que ambientó las distintas escenas.

Desde el comportamiento de las masas entre el recibimiento jubiloso a Jesucristo y el escarnio final, hasta los entresijos de los poderes políticos y religiosos en la toma de decisiones frente a la incorrompible personalidad de un Jesucristo aferrado al destino que él mismo preludia, se pudieron observar a través de La Pasión.

Arimatea, Judas, Herodes, Caifás, Poncio Pilato, el apóstol Pedero...fueron apareciendo uno detrás de otro con su respectiva caracterización, sin olvidar el papel de las mujeres sufridoras como María, María Magdalena o La Verónica.

De esta forma, los "milagros" de Cristo con los enfermos, la solidaridad con las personas denostadas como la adúltera y su mensaje o proclamación por el pueblo como hijo de Dios y Rey de los Judíos, hacen temblar los cimientos del poder, que reacciona con beligerancia, aunque no sin confrontaciones internas en la decisión de darle muerte.

En todo ello, la expresividad de los actores recreando los momentos de la pasión y decorados de pasajes como el monte de los olivos o la Última Cena, van dando paso a los más dramáticos momentos en los que apresan a Jesucristo, humillan, le hacen llevar la Cruz y finalmente lo suben a ella, provocando la conmoción del público por el realismo de algunos de los golpes y latigazos.

En ese momento, el Descendimiento que bien recuerda al Pregón que recuperó la hermandad de la Soledad por cuanto a la disposición de los actores, causa la conmoción del público presente, que estallaría en aplausos metido de lleno en la propia obra cuando Jesucristo resucita y asciende a los cielos, ovacionando a los actores al final de la misma.