- Señor, no quiero discutir contigo, pero... necesito seguir discutiendo contigo.
- Señor, ¿cuándo me convenceré de que tú eres mi Padre y yo tu hijo?
Don Luis Valpuesta, sdb
Entradas relacionadas:
Mil pequeñas oraciones, 13 de febrero
Señor, los hombres te damos, si no “malos” consejos, sí “inoportunos” consejos.
Señor, ¿cómo pudo incubarse a tu lado un Judas?
Don Luis Valpuesta, sdb
… Leer más
Mil pequeñas oraciones, 17 de febrero
Señor, qué maravilla el que hayas creado al hombre libre.
Señor, ¿nada es pecado o nada quiero que sea pecado?
Don Luis Valpuesta, sdb
… Leer más
Mil pequeñas oraciones, 14 de febrero
Señor, qué lejos estoy de comprender el valor misterioso de salvación que lleva la cruz, cuando me quejo y protesto de ella.
Señor, ¿te busco con sincero corazón o por intereses personales?
… Leer más
Mil pequeñas oraciones, 16 de febrero
Señor, tú no eres un concepto abstracto. Eres una realidad tripersonal.
Señor, que antes de pedirte algo yo piense 40 veces si me conviene.
Don Luis Valpuesta, sdb
… Leer más
Mil pequeñas oraciones, 15 de febrero
Señor, no puedo entrar en tu intimidad porque me falta un corazón más limpio.
Señor, cuando la vida me sonríe qué fácil es decir:
"quiero hacer tu voluntad", pero cuando aparece una espina o una cruz,
mi naturaleza se r… Leer más
0 comments:
Publicar un comentario
Si no puedes publicar comentarios, envíalos a comentarios_blog@aaaadb-trinidad.org indicando a qué entrada asociarlo y nosotros lo publicaremos por tí.