¿Sabías que… el nombre “salesiano” también pudiera tener su origen etimológico en el mensaje evangélico de ser sal para la tierra?
Hablar de los Salesianos en la sociedad actual es reconocer el triunfo de una educación escolar y cristiana con un estilo y un carisma muy definidos. El sistema preventivo se hace realidad en las casas salesianas, donde el ambiente de familia que se crea es muy apreciado por todos los alumnos que pasan por el patio. Salesianos incluye no sólo a los sacerdotes y demás miembros de la Congregación en sentido estricto, sino también a todos los miembros de la gran Familia Salesiana, tanto religiosos como seglares.
Pero el nombre de “salesiano” también tiene un origen etimológico. En principio, es conocido que proviene de San Francisco de Sales (1577-1622), obispo de Ginebra, a quien Don Bosco tomó como santo del lugar y santo del tiempo, el Doctor de la Iglesia se ofrecía como religión, razón y “amorevolezza”, para poder llevarlo a todos los lugares y tiempos. Ambos nacieron en Saboya, el obispo en la Alta Saboya (hoy Francia) y Don Bosco en la zona del Piamonte, que pertenecería a Italia, y donde tuvo mucha influencia la espiritualidad de San Francisco de Sales, fundamental para el proyecto de apostolado en favor de la juventud. Su estilo propone una santidad desde lo cotidiano y lo sencillo, pero destacando especialmente la amabilidad, la dulzura y la alegría interior. De ahí que Don Bosco propusiera este santo como origen de la Congregación.
Lee el artículo completo haciendo clic aquí.
0 comments:
Publicar un comentario
Si no puedes publicar comentarios, envíalos a comentarios_blog@aaaadb-trinidad.org indicando a qué entrada asociarlo y nosotros lo publicaremos por tí.